El Parque Nacional de Cabañeros es uno de los 15 parques nacionales de España que junto a las Tablas de Daimiel encontrarás en la provincia de Ciudad Real.
Destaca por ser el gran bosque mediterráneo de Europa, donde podrás verte rodeado de la fauna ibérica más amenazada, y ver fósiles de más de 500 millones de años de antigüedad.
Te vamos a proponer una ruta por los diferentes centros de interpretación y senderos accesibles para usuarios de silla de ruedas. Para dirigirte de uno a otro es imprescindible que lo hagas con un vehículo. En todos ellos encontrarás plazas de aparcamiento reservadas para PMR.
Comenzaremos nuestra ruta por el Parque en el Centro de Visitantes de Horcajo de los Montes y la exposición más grande del Parque. Desde aquí podrás observar los diferentes ecosistemas de este a través de las 4 estaciones.
Una vez finalizada la visita en centro de interpretación de Horcajo, te sugerimos que continúes hasta el Centro de Interpretación de Casa Palillos, en el que además de disfrutar de una exposición de los valores naturales y culturales del parque también podrás rodar por dos senderos adaptados a visitantes usuarios de silla de ruedas. En ambos, sendero botánico y sendero etnográfico descubrirás en mayor profundidad los recursos del parque y su historia a lo largo de los años.
La siguiente visita que te proponemos del Parque es el Centro de Interpretación Torre de Abraham, que, si bien el centro cuenta con una pequeña exposición, el paseo por los alrededores bien merece la pena. Se trata de una senda botánica sobre pasarelas alrededor del cauce fluvial del Bullaque en la que conocer la flora y fauna de esta área del parque. También alrededor del mismo centro puedes ampliar un poco tu ruta y hacerla circular combinando las pasarelas de madera con suelos de tierra compactada sin grandes complicaciones.
Por último, junto a la población de Navas de Estena se encuentra la Zona Recreativa de La Tabla del Acebo, donde se puede realizar una pequeña ruta sobre tablas de madera junto al río Estena. Una vez finalizadas las pasarelas de madera bajo tu criterio y dependiendo del tipo de silla que utilices, puedes continuar la ruta, aunque a partir de aquí el pavimento pasa a ser de tierra, no siempre en buen estado y además comienza a haber pendientes más pronunciadas en las que se puede requerir cierta ayuda extra.
Información recogida en noviembre de 2019.
